“La Paisana”

Villarejo de Salvanés es un pueblo madrileño de algo más de 7.000 habitantes. Sus lugareños son gente sencilla, como en los pueblos pequeños, donde todos se conocen y se preocupan los unos por los otros. Los feligreses de la Parroquia de S. Andrés, la Iglesia del pueblo, saben de las necesidades, penas y alegrías de todos. Ellos encomendaban al hijo de esa vecina que no tiene trabajo, la enfermedad del señor que dejó de venir a la Iglesia po r estar impedido… Y andaban algo preocupados por una madre que sufría mucho por uno de sus hijos. Una de las feligresas, que es natal de la provincia de Jaén, a la que suele ir con frecuencia, recordó lo que contaron allí: que había una monja muy conocida, que había hecho un milagro muy grande a una madre que se moría. ¿Quién mejor que ella podría entender el sufrimiento del corazón…